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Mi vocación como fotógrafo no nace de la nada, se la debo a mi padre y su pasión por la fotografía. Sus cámaras de carretes, su cuarto oscuro donde revelaba y donde yo de vez en cuando quería estar para “escuchar” y “oler” lo que hacía… Mientras lo observaba, siempre me preguntaba cómo podía moverse en total oscuridad sabiendo qué hacer, dónde encontrar las cosas que le hacían falta y allí, al mezclar los líquidos, la película poco a poco tomaba forma y colores hasta convertirse en realidades que contaban historias y guardaban recuerdos…


Y así crecí yo, también con mi pequeña cámara de carrete disparando fotos durante el verano y las vacaciones, el colegio, las fiestas…coleccionando recuerdos que ahora tengo conmigo y que de vez en cuando rescato con mis amigos para recordar los momentos que compartimos juntos. Poco a poco esa afición, que me acompaña desde que alcanzan mis recuerdos, se ha ido transformando en mi día a día, en un modo de vida para mí. Captar una imagen, atrapar un momento para hacerlo eterno, contar historias…

Nací en Palermo (Italia), y la vida y el amor me han traído hasta Granada que es donde vivo desde hace varios años. Estoy casado y tengo dos hijos que son mi inspiración y mi locura a partes iguales. En esta ciudad llena de encanto es donde desarrollo mi actividad principalmente, pero estoy encantado de desplazarme donde sea necesario para contar y compartir una historia, la tuya, la vuestra.

He recibido esta herencia de mi padre y ahora que ya no está conmigo sé que me une a él allí donde está…